Ya el año pasado Criterion hicieron un excelentísimo trabajo con Need For Speed Hot Pursuit, yo personalmente le di un tute cojonudo. Ahora Electronic Arts ha puesto en las manos de Black Box la siguiente entrega de la marca NFS, y como ya ocurriera con Hot Pursuit, la apuesta por este estudio parece muy acertada.
Y es que no solo va a ser un juego frenético de conducción, sino que la temática que le van a dar se presenta cojonuda, nos pondremos en el pellejo de Jack, un corredor que participa en una carrera de costa a costa, claro esta no va a ser un paseo con una rubia en el asiento de copiloto. Jack va a estar bien jodido, desde persecuciones con otros coches, hasta helicópteros de la mafia que querrán interceptarle.
Las partes en que nuestro protagonista tiene que interactuar con otros personajes (es decir soltar una buena hostia para robar un coche) se desarrollaran mediante quicktime events. Que nadie se asuste por esto, ya que durante la presentación se confirmó que solo serian un 10% del juego. También hemos podido saber que habrá más de 300 kilómetros de carreras, y que podremos pasar por ciudades muy conocidas. Lo que es a mi, ya me lo han vendido, promete ser un locuron de juego, en el que nuestro corazón estará al limite del infarto.
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